En la jornada de hoy, la Cámara de Senadores de la República discutió sobre la Ley de Descentralización.
Al hacer uso de la palabra, el Senador y líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, quien fue Intendente de Paysandú por 10 años, indicó: “Este país está enfermo de centralismo y eso es una realidad inocultable”. Expresó que la descentralización es acercar el poder del Estado a la gente para lograr que los ciudadanos tengan igualdad de oportunidades vivan en donde vivan. “La descentralización apunta a la calidad democrática e institucional del país, a un proyecto de país.
Es increíble cómo se ha violado de forma sistemática la autonomía de los gobiernos departamentales a lo largo de la historia. Se incumple la Ley cuando se genera una institucionalidad paralela o estructuras espejo para quitar poder de decisión a los Municipios. Las hay en casi todas las administraciones departamentales”.
Compromiso
Larrañaga reafirmó su compromiso histórico con la descentralización. “Hemos surgido en política desde el interior del país, contra los centralismos cupulares de todos los partidos.
Recuerdo haber sido el primer intendente, creo que en la historia del Uruguay, que integró las juntas locales de su departamento con integración de todos los partidos”.
“Qué vamos a hablar de descentralización si no tenemos ni un aeropuerto de funcionamiento nocturno en el interior del país. Tenemos obras de balizamiento y no hay personal para atenderlo, no hay CTI en todas las ciudades”, sentenció y contó que desde Paysandú se gestionó durante más de 8 años la colocación de un tomógrafo para dicho departamento. La gestión exitosa se completó por una llamada del Senador Larrañaga al Presidente de la República en ese momento, José Mujica, ya que se contaba con todos los informes positivos, pero faltaba la autorización del Ministerio de Salud Pública.
“El centralismo en este país es un largo padecimiento, donde muchas veces nacer en el interior o en algunos barrios de Montevideo suena a una condena anticipada. Se ha escrito con la mano y se ha borrado con el codo, y creemos que hay que avanzar hacia un proceso de federalización de cometidos y servicios.
Uruguay ha sido y es un territorio fragmentado, dividido en realidades distintas. Ha primado históricamente una visión de ciudad puerto”.
Comisión de Descentralización
El líder nacionalista expresó que “Se habló de la Comisión de descentralización, a la cual, no acuden los ministros, ni aun cuando se aprobó la reforma constitucional. Incluso allí muchas veces viene la imposición del Poder Ejecutivo respecto a algunas iniciativas”.
Conformación del Producto
Con cifras, Larrañaga demostró el rezago del interior: “El interior contribuye con el 45% en la formación del producto, pero con un retorno significativamente menor. Hoy seguimos con un desarrollo del interior del país, postergado. Los uruguayos somos más que la suma de ciudadanos, somos una comunidad. Pero debemos compartir obligaciones y derechos para tener esas oportunidades”.
“Descentralizar hoy es un acto de justicia, es acercar el Estado a la gente. Implica igualar posibilidades de superación entre los uruguayos. Debe recrearse la posibilidad de igualdad de posibilidades sin importar donde se nazca o donde se viva. Todos sabemos que eso, hoy, no es así”.
Descentralizar la caja.
“La descentralización es la descentralización de la caja fuerte, esa es la descentralización, la descentralización de los recursos”. Argumentó que “en la década del 90, de cada 100 pesos de ingresos, 90 eran de percepción local y solamente 10 eran de percepción y traspaso nacional. Hoy la realidad es que es un 50 y un 50. Y eso marca que si yo estoy esperando desde lo local la transferencia de lo nacional, la autonomía es una fachada. Esta mimetizada por distintos instrumentos, pero lo real es lo real”.
Regionalización
“Hablamos de la inclusión de la realidad local en los procesos. Tenemos centralización de la capital respecto al interior y tenemos centralización de las capitales departamentales con relación al interior de cada uno de los departamentos. Hay que avanzar en una agenda inclusiva, que suponga una integración política, física y geográfica, una integración social, económica y cultural. Integrar para crecer. Ese es el desafío de este tiempo. Impulsar agencias de desarrollo regional, que sumen lo local con lo nacional, lo público con lo privado para así potenciar el desarrollo”.
Poder
Larrañaga señaló que descentralizar significa desprenderse de poder, y nadie quiere desprenderse del mismo. “Todos quieren seguir con la tutoría, el gobierno nacional con su poder, el gobierno departamental, el Intendente con el suyo. Esto es así”.
Agregó que los municipios no pueden hacer una licitación de nada, no tienen equipos contables, ni recursos económicos suficientes para hacerlo: “Si se administrara desde lo local, habría control y optimización en el gasto, ya que muchas veces el Intendente desde la capital departamental administra peor que los propios locales, desde la propia localidad”.
Compleja situación en Municipios de Young y Guichón
Larrañaga se refirió a las situaciones que se han dado tanto en Río Negro como en Paysandú, específicamente en los Municipios de Young y Guichón respectivamente.
“Las limitaciones que se le han impuesto a la alcaldesa de Young no me parecen correctas. Me parece que son incorrectas, arbitrarias y limitantes de una autoridad que ha sido electa por la soberanía popular”.
Agregó que a su modo de ver, “no necesita el intendente de Río Negro concurrir a esa forma de gestionar el gobierno departamental”.
Del mismo modo se refirió a la situación que acontece en Paysandú. “Históricamente las Termas de Almirón estuvieron administradas por lo que antes era la junta local de Guichón, porque está a 3 kilómetros, porque sus funcionarios viven allí, porque es necesario que la comunidad local gerencie e impulse respuestas a un centro turístico de vital desarrollo para esa parte del departamento, alejada y postergada en cuanto a respuestas laborales”.
Autonomía o tutelaje
Finalizando su intervención, Larrañaga sentenció que “si las autonomías son tuteladas no son autonomías. O hay autonomía o hay tutelaje, y si hay tutelaje no hay desarrollo local, no hay descentralización, es una farsa, una enfermedad que debemos corregir”.
“Uno recorre el país y los mismos problemas que existían en muchos casos hace 30 años siguen existiendo ahora. Y entonces tenemos cercanías de papel que luego las burocracias del Estado Central se encargan de que generen postergaciones, inequidades e injusticias de mayor tamaño”.
