En la jornada del martes 4 de abril, el diputado por Treinta y tres, Edgardo Mier, se refirió a dos temas relacionados con el Banco de Previsión Social, otorgamiento de pensiones a la vejez y la exoneración del aporte por mano de obra benévola.
Otorgamiento de las pensiones a la vejez.
El Representante nacionalista, Mier, hizo referencia a doña Jacinta Silva, oriunda de Treinta y tres, de 112 años de edad. Al respecto el legislador indicó que en el transcurso del año pasado, y a raíz de este tema, descubrió una realidad que es imprescindible revisar: las exigencias para el otorgamiento de las pensiones a la vejez.
Indicó: «A doña Jacinta Silva le fue negada su pensión a la vejez por estar a cargo de un hijo soltero que cobra $ 14.000 por mes como retirado militar, a pesar de haber trabajado toda su vida.Muchos años trabajó al servicio de la escuela pública en el medio rural, sobre lo que abundan los testimonios, aún hoy ‑falta la aprobación del Senado‑, doña Jacinta no recibe ningún reconocimiento del BPS, con seguridad porque, reglamentaciones mediante, se considera que $ 14.000 son suficientes para que un anciano viva dignamente y, además, se haga cargo de su madre».
Mier subrayó que hay más de quinientos ancianos en Uruguay con más de cien años. «Muchos de ellos no aportaron a la seguridad social en sus años jóvenes, pero ¿quién lo hacía en las décadas del cuarenta y del cincuenta?»
Culminó pidiendo al Poder Ejecutivo que revise las pautas para el otorgamiento de las pensiones a la vejez, las flexibilice y eleve los topes, por lo menos a media canasta básica para los ingresos familiares, y que se establezca el otorgamiento a las pensiones a la vejez en forma obligatoria para los uruguayos mayores de noventa años de edad.
Exoneración del aporte por mano de obra benévola
Como segundo punto, el legislador olimareño se refirió a los muchos trámites que un vecino debe de hacer para realizar refacciones o pequeñas obras en su hogar, aún si el trabajo será realizado por el mismo o por su familia o amigos.
Subrayó: «Cuando un vecino necesita ampliar, refaccionar o pintar su modesta vivienda, si no quiere ser prácticamente ejecutado por el BPS debe realizar el trámite de mano de obra benévola. Aunque estas obras las haga él con su familia y amigos debe completar más de diez formularios, algunos con informaciones técnicas en soporte informático y certificación de escribano público. La verdad es que el trámite es casi imposible de completar por una persona común, de modestos recursos».
Frente a tal realidad, Mier culminó sus palabras solicitando la revisión y disposición de la exoneración del aporte por mano de obra benévola, simplificando los trámites.
Pidió además que se adopte esa resolución cuando se trate de viviendas modestas, así como de refacciones, pinturas o ampliaciones realizadas por sus propios dueños y familiares, teniendo en cuenta la actualización de los valores de reglamentación, con los pies en el mundo real, en el día de hoy.
