Debido a los tristes acontecimientos ocurridos anoche en el Estadio Centenario, el periodista Daniel Castro consultó al Diputado Jorge Gandini sobre el proyecto de ley de Seguridad Privada que se está discutiendo en la Comisión Especial de Seguridad y Convivencia de la Cámara de Representantes.
Gandini explicó que este proyecto regula a las empresas de seguridad, los derechos y atribuciones de los empleados de esas empresas y regula una de las actividades, que es el transporte de valores. Un solo artículo dice que en los espectáculos masivos deportivos, musicales, políticos, culturales, gremiales, los responsables de la seguridad serán los organizadores y los patrocinadores, que deberán contratar una empresa privada que será responsable de la seguridad dentro del recinto o dentro de los limites que se fijen.
“Nosotros cuestionamos eso”, -dijo Gandini-, “primero de fondo y segundo de forma, porque si el Estado va a delegar la custodia de un espectáculo que es publico, aunque sea organizado por un privado, tiene que transferirle potestades a quien controla la seguridad. No puede ser que una persona por tener un uniforme caqui con el escudo en el hombre tiene la autoridad de disuadir y controlar como lo hace la policía. El Ministro dice que solo puede hacer el arresto ciudadano. Es decir, puede detener a una persona in fraganti delito, como lo puede hacer un ciudadano cualquiera. No es lo mismo la presencia policial.”
“Si el Ministerio se quiere sacar de encima la responsabilidad de custodiar adentro de un espectáculo público donde hay muchísima gente, tiene que darle entonces un protocolo de garantías y de actuación a los privados que actúan allí, no para que estén armados, sino que tengan potestades para intervenir y disuadir”, manifestó el legislador.
No se cumple con lo acordado
“Es a la policía a la que la sociedad le ha transferido esa potestad de custodia, y le ha dado algunas excepciones que no existen para los demás civiles para que pueda actuar. Por ejemplo, le ha dado las armas, le ha dado las fuerzas. Tampoco se cumple con lo estrictamente acordado. Hay una Comisión de Seguridad en el Deporte que ha firmado un protocolo. Se supone que la custodia fuera del perímetro la hace la policía, y por lo tanto debería hacer el cacheo, la revisión de las personas que entran. A mi me dicen que anoche, en algunas puertas del Estadio Centenario no había revisión; y en otras, incluso en las de la Tribuna Amsterdam, había, pero cuando venían muchos hinchas juntos en actitud de barra, la seguridad privada se hacía a un lado. ¿Cómo detienen a esas personas si no está la policía?”, se preguntó Gandini. “Cuando juega Uruguay, las puertas están colmadas con policías con uniforme casi militar y eso ya impone un respeto, restringe, controla y revisan todo”, comentó.
Para el Diputado, la pregunta es si eso puede hacerlo un particular que no tiene delegada la función para poderlo hacer, y si tienen garantías para realizar esa función. “No sabe hasta dónde puede actuar. Ese es un límite que no se ha establecido.”
Un elemento más en la interpelación
A horas de la interpelación del Ministro del Interior, lo ocurrido en el Estadio Centenario será un elemento más a considerar. “¿Cómo van a decir que el arma la habían colocado hace unos días?, ¿cómo surge esa teoría?, ¿cómo lo saben, si no encontraron el arma ni a la persona que disparó? Eso es para sacar la pata del lazo, para sacarse las culpas. Seguramente el arma entró ayer y salió ayer mismo, porque no hay controles adecuados. Ya el problema no es que ingresan violentos al futbol, ingresan delincuentes al futbol. Yo se lo dije al Ministro, adentro del Estadio se cometen delitos. ¿Cómo le vamos a pedir a un particular de una empresa privada que no solo cuide la seguridad, sino que además se cometen delitos? En los baños se trafica droga, se rapiña, se cobra peaje; o sea, se cometen delitos violentos con armas”, manifestó Gandini en La Mañana de El Espectador.
El Ministro y el Subsecretario representan una política pública que ha fracasado
Estableció que es verdad que hay que atacar las causas, “generadas en buena medida por este gobierno. Ya no podemos hablar de la crisis de los gobiernos de los partidos tradicionales, el Frente Amplio gobierna hace 12 años y las causas de la violencia y la marginalidad siguen y hay cada vez más procesados, más violencia, más delito. Hay un claro problema de gestión de quienes tienen que utilizar los recursos humanos y económicos disponibles para dar seguridad.”
“Cuando le pedimos la renuncia al Ministro y no tenemos los votos para hacerlo, entonces es como dice Larrañaga, lo presupuestamos. El gobierno por contraposición lo sostiene, lo sabemos. Al mismo tiempo es lo que tenemos y podemos hacer. El Ministro y el Subsecretario representan una política pública que ha fracasado.”
Gandini detalló que el Ministerio del Interior ha tenido presupuesto, “desde el 2005 se ha aumentado tres veces el presupuesto para más equipamiento, mejores salarios, eliminar el servicio 222 y más policía. Creemos que hay que poner un acento importante en la gestión de la seguridad, hay que respaldar al policía.”
“El Ministerio se ha llenado de civiles, casi todos vinculados a un mismo sector político, con una misma visión y desde allí se impone una forma de gestionar la seguridad que no cuenta con el respaldo profesional. Hay que trabajar más con esos profesionales de la policía, hay que darles respaldo para que puedan actuar y hay que atacar las bases del problema”, terminó diciendo el legislador de Alianza Nacional.´
Foto: El espectador