Formar en Valores y construir ciudadanía, cumpliendo con el artículo 71 de la Constitución, cuyo mandato prescribe dicha obligación sin discriminar entre niveles educativos ni entre formas de administración de las instituciones. No se trata de una mera información o tratamiento aleatorio de las cuestiones morales y de ciudadanía, sino de algo más fuerte y sistemático.
Consideramos que este cometido puede cumplirse sin agregar nuevas materias, a través de un enfoque de transversalidad.
Para su implementación proponemos
- La planificación de espacios de trabajo específicos,
- Un plan de desarrollo de cuestiones y temáticas explícitas trabajadas con sistematicidad y una metodología adecuada. No es posible improvisar o guiarse por meras intuiciones en un área tan delicada de formación de la persona y de la ciudadanía democrática.
- La construcción dialogada entre docentes y estudiantes de normas de convivencia y criterios de relación, devolviéndoles su significación y sentido. Los abordajes de conflictos y escenarios de violencia deben ser objeto de contratos de convivencia que permitan dichas construcciones.