Jorge Larrañaga pateó el tablero y movilizó la interna blanca al afirmar enfáticamente a LA REPÚBLICA que lejos de dar un paso al costado en su intención de ser candidato en la interna del Partido Nacional, se siente con “una enorme fortaleza, vigencia, apoyo y fe”, convencido de que pueda ganarla.
Negó que Verónica Alonso le haya planteado bajarse de la candidatura -como lo afirmó Búsqueda en su edición de ayer-, y encabezar la lista al Senado, dejando a la senadora el camino abierto para enfrentar a Luis Lacalle Pou en las elecciones internas.
“No tenemos que dramatizar con la unidad”, indicó y se mostró convencido de que el wilsonismo es el que más posibilidades tiene de llegar al gobierno, porque “no está en los extremos” y es más convocante.
Reiteró que está abocado a definir una agenda de temas comunes para luego consensuar con el resto de partidos de oposición.
Mucho se habla sobre las divisiones y discusiones dentro del Partido, ¿cree que esto puede significar una debilidad de cara a las próximas elecciones?
No tenemos que dramatizar con la unidad como fin en sí mismo. Siempre dentro del Partido Nacional ha existido diversidad, porque es la esencia de la democracia y de los partidos políticos. El Partido Nacional tiene sus cimientos y estos serán fuertes sobre la base de sectores grandes y potentes. Por tanto hay que fortalecer sectores y con ello se fortalece al Partido. Quien no entienda que la base de la victoria del Partido se basa en fortalecer los sectores no entiende al Partido Nacional.
Por eso le digo y reafirmo que el Partido Nacional debe tener elecciones. Es la base imprescindible e ineludible de legitimación democrática y es la elección la que dirime las diferencias internas.
¿Cree que la aparición de nuevos sectores es algo positivo para el Partido?
Quien quiera lanzar una precandidata o crear un sector tiene toda la libertad y el derecho de hacerlo.
¿Qué piensa sobre la postura de algunos intendentes de promover un nuevo espacio? ¿Cree que es posible llegar a un acuerdo con ellos?
Tengo por ese grupo de intendentes afecto, aprecio y respeto por su valía política y personal. Tengo confianza en que el común objetivo de fortalecer la visión wilsonista, de nacionalismo popular es muy necesaria. Esta visión del Partido, esta forma de entender la sociedad y el país que nosotros llamamos wilsonismo, es lo que el país precisa, porque es el modelo más integrador, socialmente transversal e inclusivo que tiene el país, por eso es el que puede representar a más gente.
El wilsonismo no está en los extremos, tiene una enorme fortaleza para ser más convocante, representar a más ciudadanos y por tanto llegar al gobierno.
¿Es cierto que Alonso le planteó ser precandidata del sector?
La conversación con la senadora Alonso es una más entre tantas que hemos tenido y tenemos cotidianamente con diferentes compañeros. No suelo hacer y no será esta la excepción, comentarios sobre una reunión privada, solo diré que no hubo tal planteo. Pero aprovecho la ocasión para expresarle que me siento con una enorme fortaleza, vigencia, apoyo y fe en ganar las elecciones internas y ser el candidato del Partido Nacional.
¿Ud. Planteó un acuerdo programático entre los partidos de oposición, ¿en qué consiste? ¿Cree que es posible llevarlo adelante?
Estamos convencidos que el país precisa transitar sobre algunos entendimientos clave. Hemos hablado de construir un arco opositor contra la resignación, instalada en algunos sectores del país que piensan que no se puede cambiar, que no se puede mejorar. Hay que superar y mejorar muchos aspectos del país y eso se consigue sobre base de acuerdos. Por eso planteo que quienes queremos cambiar cosas, tenemos que estar juntos.
Y en las últimas horas le plantee a mi Partido que comencemos el trabajo programático a nivel interno, definir una agenda de temas comunes que podamos luego consensuar con el resto de partidos de oposición -que son los que queremos cambiar y superar el estado actual de cosas- y convocar a la mayor cantidad de ciudadanos, vengan de donde vengan.
Usted me pregunta si es posible. Creo que es viable, es posible, pero sobre todo es necesario. Porque los que queremos cambiar cosas, venimos de distintos lugares, con distintas identidades, por tanto la forma de confluir, sin renunciar a esas identidades, es en base a ciertos temas centrales, serán 6, 7, 8, los que se puedan. En base a esos acuerdos, a conciliar ciertos temas comunes, lograremos garantizar mayorías parlamentarias.
Por estas cosas creo que es necesario y estoy enfocado en eso, en crear una agenda común de respuestas para la gente.
¿Cuáles serían esos temas?
Es parte de lo que hay que hablar y consensuar, pero es imperioso que tengamos un rumbo de cambio en materia educativa, en materia de seguridad, en inserción internacional, que tengamos especial atención en el desarrollo del interior, en defender el país productivo, que aseguremos atención y calidad en salud pública, que prioricemos el fomento del trabajo, en tiempos donde las condiciones del empleo cambian, donde hay robotización y donde la formación es cada vez más necesaria. Son temas que deben estar en la mesa de discusión.
